Diferencias entre pensiones contributivas y no contributivas
Contenidos 👇
Las pensiones son un derecho que tienen los ciudadanos en muchos países del mundo, especialmente aquellos con sistemas de seguridad social. Sin embargo, dentro de las pensiones existen diferentes tipos y características que es importante conocer para poder acceder a ellas ,correctamente.
¿Qué son las pensiones contributivas?
Las pensiones contributivas son aquellas que se basan en la cotización previa del trabajador o trabajadora al sistema de seguridad social. Esto significa que para tener derecho a una pensión contributiva, es necesario haber trabajado y cotizado durante un cierto periodo de tiempo determinado por la legislación de cada país.
Cuando un trabajador o trabajadora cotiza a la seguridad social, parte de su salario bruto se dedica a ese fin. En algunos casos, el empleador también debe hacer una aportación adicional. La suma total acumulada durante el tiempo de trabajo será lo que determine la cantidad y duración de la pensión.
En general, las pensiones contributivas son más altas que las no contributivas debido a que el trabajador o trabajadora ha realizado una inversión económica durante su vida laboral.
¿Qué son las pensiones no contributivas?
A diferencia de las pensiones contributivas, las no contributivas no están basadas en el historial laboral ni en la cotización al sistema de seguridad social. Por tanto, están dirigidas a personas que nunca han tenido empleo remunerado o cuyos ingresos han sido insuficientes para generar cotizaciones suficientes.
Las pensiones no contributivas son, en términos generales,, más bajas que las contributivas. Estas pensiones están destinadas a personas mayores de 65 años o con discapacidad, así como a aquellos ciudadanos y ciudadanas que no tienen ingresos suficientes para vivir dignamente.
El importe de la pensión no contributiva dependerá de cada país y se calculará en función de los ingresos del beneficiario o beneficiaria. En algunos casos, se puede complementar con ayudas adicionales para cubrir necesidades básicas como la alimentación, la vivienda o el transporte.
¿Cómo solicitar una pensión?
La solicitud de una pensión debe realizarse según los procedimientos establecidos por cada país. Generalmente, es necesario presentar documentación que acredite tanto la identidad como los datos laborales (en el caso de las pensiones contributivas) o los ingresos (en el caso de las pensiones no contributivas).
- Para solicitar una pensión contributiva se deberán presentar documentos como el número de afiliación a la seguridad social, historial laboral completo y certificados médicos en caso de enfermedad o incapacidad.
- En cambio, para solicitar una pensión no contributiva será necesario demostrar que se cumplen los requisitos específicos establecidos por cada país. Esto puede incluir presentar un informe médico que certifique la dis,capacidad o situación económica precaria del solicitante.
Es importante tener en cuenta que las leyes y regulaciones sobre pensiones varían considerablemente entre países e incluso dentro del mismo país pueden existir diferentes regímenes y condiciones según la comunidad autónoma o provincia. Por tanto, es recomendable acudir a organismos oficiales y expertos en derecho laboral para recibir una orientación personalizada.
Conclusión
En resumen, las pensiones contributivas son aquellas que se basan en el historial laboral y cotizaciones al sistema de seguridad social, mientras que las no contributivas están destinadas a personas que no cumplen esos requisitos. Ambas son importantes para garantizar un retiro digno y justo para todos los ciudadanos y ciudadanas.
Es fundamental conocer los detalles de cada tipo de pensión y los procedimientos para solicitarlas correctamente. En caso de duda o dificultad, siempre se puede buscar ayuda profesional para asegurar que se accede a todos los derechos correspondientes.
