Titularidad compartida explotaciones agrarias

Titularidad compartida explotaciones agrarias: ¿qué es y cómo funciona?

La titularidad compartida de explotaciones agrarias es una figura legal que busca fomentar la igualdad entre hombres y mujeres en el sector agropecuario. Se trata de una forma de compartir la propiedad, gestión y dirección de una explotación agraria entre al ,menos dos personas, una de las cuales debe ser mujer.

¿Qué implica ser titular compartido?

En primer lugar, es importante destacar que para ser titular compartido es necesario cumplir con ciertos requisitos legales establecidos por la normativa correspondiente. Entre ellos se encuentran:

  • Ser mayor de edad
  • No estar incapacitado judicialmente
  • Tener capacidad legal para contratar
  • No haber sido condenado por delitos graves relacionados con la explotación agraria
  • Acreditar experiencia en el sector agropecuario

Una vez cumplidos estos requisitos, se puede proceder a formalizar la titularidad compartida. Esto implica repartir los derechos y obligaciones entre los titulares, lo que incluye:

  • Derecho a usar y disfrutar de la explotación agraria
  • Obligación de contribuir económicamente a su mantenimiento y mejora
  • Derecho a participar en las decisiones importantes relacionadas con la explotación (por ejemplo, qué cultivos plantar o qué maquinaria adquirir)
  • Obligación de cumplir con las normas y requisitos legales establecidos para la explotación agraria

En cuanto a la gestión de la explotación, los titulares pueden decidir cómo repartirse las tareas y responsabilidades., Por ejemplo, pueden acordar que uno se encargue de la parte administrativa y otro de la parte productiva, o bien pueden repartirse el trabajo por igual.

¿Qué ventajas tiene ser titular compartido?

La titularidad compartida ofrece varias ventajas tanto para los titulares como para la propia explotación. Algunas de ellas son:

  • Fomenta la igualdad de género en el sector agropecuario, al permitir que las mujeres tengan un papel más activo en la gestión y dirección de las explotaciones.
  • Permite una mayor diversificación de conocimientos y experiencias entre los titulares, lo que puede traducirse en una gestión más eficiente y mejoras en la producción.
  • Reduce el riesgo económico para cada titular al compartirlo entre dos o más personas.
  • Puede facilitar el acceso a ayudas públicas y subvenciones destinadas a fomentar el relevo generacional en las explotaciones agrarias.

¿Cómo formalizar una titularidad compartida?

Para formalizar una titularidad compartida es necesario seguir ciertos pasos. En primer lugar, es recomendable buscar asesoramiento legal especializado para conocer todas las implicaciones y requisitos necesarios según cada caso concreto.

A continuación, se debe presentar ante la autoridad competente (normalment,e el Registro de Explotaciones Agrarias) una solicitud de inscripción en el Registro de Titularidad Compartida, acompañada de la documentación necesaria que acredite el cumplimiento de los requisitos legales exigidos.

Una vez inscrita la titularidad compartida, se debe comunicar cualquier cambio o modificación que afecte a los titulares o a las características de la explotación.

Conclusión

La titularidad compartida es una figura legal interesante para fomentar la igualdad entre hombres y mujeres en el sector agropecuario. Ofrece numerosas ventajas tanto para los titulares como para la propia explotación, aunque es importante cumplir con los requisitos legales establecidos y buscar asesoramiento especializado antes de formalizarla.

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