Cómo tributan los excesos de adjudicación en herencias
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Una herencia es un proceso legal que se lleva a cabo después del fallecimiento de una persona. En ella, se distribuyen los bienes y derechos del fallecido entre sus herederos legales y testamentarios. Cuando una propiedad o bien supera el valor asignado a ,un heredero, se produce lo que se conoce como «exceso de adjudicación».
¿Qué son los excesos de adjudicación?
Los excesos de adjudicación son aquellos casos en los que la parte proporcional recibida por el heredero supera el valor total del bien o propiedad. Por ejemplo, si el valor total de un inmueble es de 200 000 euros y dos personas lo heredan al 50%, cada una tendría derecho a recibir 100 000 euros. Si uno de ellos decide renunciar a su parte proporcional, la otra persona recibiría el inmueble completo y esto supondría un exceso de adjudicación.
En estos casos, existe una obligación fiscal para el beneficiario que recibe ese excedente, ya que Hacienda considera que ha obtenido una renta no declarada.
¿Cómo tributan los excesos de adjudicación?
Los excesos de adjudicación tributan como ganancias patrimoniales en la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). El impuesto se calcula sobre la diferencia entre el valor real del bien o propiedad y la cantidad asignada al beneficiario.
El tipo impositivo que se aplica a los excesos de adjudicación depende del tiempo que haya transcurrido desde la fecha de adquisición del bien o propiedad. Si han pasado menos de un año, se considera una ganancia patrimonial y tributa al 19%. Si han pasado, más de un año, la tributación varía según el tramo impositivo en el que se encuentre el beneficiario.
Es importante tener en cuenta que los excesos de adjudicación no están sujetos a retención, por lo que es necesario declararlos en la declaración anual.
¿Cómo evitar los excesos de adjudicación?
Los excesos de adjudicación pueden evitarse si los herederos llegan a un acuerdo previo sobre cómo distribuir los bienes y propiedades. Es recomendable realizar una valoración previa para conocer el valor real de los bienes y establecer acuerdos justos entre las partes.
Otra forma de evitar los excesos de adjudicación es renunciando a la herencia. En este caso, el heredero renuncia a su parte proporcional y esta pasa al siguiente heredero con derecho a ella.
Conclusión
En resumen, los excesos de adjudicación son aquellos casos en los que un heredero recibe una parte proporcional mayor al valor total del bien o propiedad. Están sujetos a tributación como ganancias patrimoniales en el IRPF y su tipo impositivo varía según el tiempo trascurrido desde la adquisición del bien o propiedad. Para evitarlos es recomendable llegar a acuerdos previos entre las partes o renunciar a la herencia.
- Realizar una valoración previa para conocer el valor real de los bie,nes.
- Llegar a acuerdos justos entre las partes sobre cómo distribuir los bienes y propiedades.
- Renunciar a la herencia en caso de no estar de acuerdo con la parte que te corresponde.
